Existen incentivos que además de representar grandes beneficios para los colaboradores, también lo son para las empresas, y son conocidos como bonos laborales.
Esto, porque además de lo positivo que es tener colaboradores felices, leales y satisfechos, algunos de ellos implican deducibilidad de impuestos.
A continuación, presentamos qué son los bonos, cuáles son los más comunes en el ámbito empresarial y cómo puedes elegir los adecuados para tus colaboradores.
Como dato extra, antes de entrar en materia, les dejamos este dato:
“Las empresas con una cultura de felicidad tienen hasta un 66% menos de bajas laborales.”
Para empezar, podemos clasificarlos en dos:
- Los incentivos, que son los que llevan asociada una retribución económica al salario habitual, o sea, obtienes un dinerito extra.
- Los incentivos no económicos, que son los que ayudan a mejorar las condiciones laborales de los empleados, sin recibir un “extra” monetario.
Incentivos
- Bonos: Ya sea de puntualidad, productividad o incluso de permanencia, éstos premian el cumplimiento de cierta meta preestablecida.
- Gratificaciones grupales: Pueden ser por departamento y se dan por haber rebasado la meta general.
- Comisiones: Se trata de un porcentaje del valor total de una transacción, usualmente contemplado en el salario de los vendedores.
- Vales de despensa: Uno de los más valorados por colaboradores y empresas, ya que además de representar la oportunidad de compensar el descuento de los impuestos y poder canjearlos en diversos establecimientos, también representan beneficios para las empresas, al permitirles deducir en un 53% sobre Impuesto Sobre la Renta (ISR).
Esto gracias a que la Reforma Fiscal ha designado que los gastos realizados por una empresa para el bienestar y aumento de calidad de vida de los colaboradores puedan deducirse si dichas prestaciones no disminuyen entre ejercicios fiscales.
Incentivos (bonos) no económicos
Se trata de aquellas acciones encaminadas a mejorar las condiciones laborales del colaborador.
Estos pueden ser de una gran variedad siendo los más comunes:
- Flexibilidad horaria
- Seguros de vida
- SGMM
- Transporte
- Actividades recreativas
- Servicio de comedor
- Becas para seguir estudiando
Ahora bien, la buena noticia, es que, los bonos por puntualidad y asistencia, al causar impuesto sobre la renta y al estar justificados con base a una problemática de inasistencia e impuntualidad, son 100 % deducibles para los patrones.
¿Conocías este dato? Eso definitivamente juega en favor de ambas partes.
Por lo tanto, el ISR se aplica sobre los bonos que otorgan las empresas a sus empleados, dado que se considera una gratificación.
¿Cuáles ingresos pagan impuestos?
Como trabajador tienes ingresos por los que se paga un impuesto como son:
- Del aguinaldo que recibes hasta 30 unidades de medida y actualización.
- De la prima vacacional hasta 15 unidades de medida y actualización.
- Del reparto de utilidades que te da la empresa hasta 15 unidades de medida y actualización.
Por otro lado, tienes la posibilidad de deducir algunos datos personales como:
- Gastos médicos, dentales, hospitalarios, servicios profesionales de psicología y nutrición.
- Gastos funerarios.
- Intereses reales y devengados por créditos hipotecarios.
- Donativos.
- Lentes.
- Colegiaturas.
Por último, te recomendamos que elabores tu declaración anual aún cuando no estés obligado a hacerla. De esta forma puedes restar tus deducciones personales y, posiblemente, obtendrás un saldo a tu favor.